Healthy Life

"Mens sana in corpore sano"

"Mente sana en cuerpo sano"

Somos muchos los que conocemos este mantra pero pocos los que lo llevamos a cabo. Bien porque pensamos que aún somos jóvenes y tenemos tiempo, porque no tenemos tiempo, porque nos da pereza... Mil y una explicaciones que nos damos a nosotros mismos para posponer este estilo de vida.

Yo soy la primera que pensaba siempre mañana me pongo al lío, aún tengo tiempo, ahora estoy bien así. Pero sinceramente, desde que estoy haciendo vida sana, ¡vivo mucho mejor! Me pregunto a mí misma por qué no lo he hecho antes.

Quiero dejar claro que no soy nutricionista ni nada por el estilo, aquí sólo os voy a hablar de mi experiencia personal y para nada os estoy diciendo que es lo que tengáis que hacer vosotros.

Yo empecé gracias a mi hermano porque desde hace un par de años se ha vuelto el tío más sanote que os podáis echar a la cara, así que lo tenía todo el día diciéndome que tenía que ponerme con él a hacer ejercicio y tal.

Así que hace unos meses cogí el toro por los cuernos y comencé mi vida sana.

¿Qué es lo que hago? Pues básicamente hago ejercicio cuatro o cinco días a la semana. Voy al gimnasio y cada día me gusta hacer algo diferente porque, sinceramente, creo que es la mejor manera de no aburrirse haciendo ejercicio.

Hay una gran variedad de actividades hoy en día para ejercitar el cuerpo y divertirnos a la vez, ¿te aburres como una ostra en la sala de máquinas pero te encanta bailar? ¡Pues haz Zumba o salsa o cualquier tipo de baile! ¿Eres de las que prefiere dar patadas y puñetazos? ¡Pues alístate en Body Combat! No hay escusas para no encontrar una actividad que te apasione.

Y es también muy importante inculcarle este estilo de vida hasta a los más pequeños de la casa, ya que así crecerán más sanos, con menos problemas de salud y más felices, porque está demostrado que hacer deporte libera hormonas que te hacen sentir bien, ¡y además en los deportes de equipo se lo pasará genial con sus amigos!

¡Y nunca nunca nunca olvidemos los estiramientos! Parte tan importante como el propio ejercicio, porque el no estirar conlleva que los músculos vayan acortándose debido al esfuerzo que hacen durante el entrenamiento y puede producir lesiones.

También es importantísimo comer sano, y por comer sano no me refiero a comer ensaladas (¡sino ya habría muerto de hambre!), me refiero a comer variado, en las cantidades adecuadas y evitar los alimentos que más perjudican a nuestro organismo. Además, debemos beber bastante agua para drenar el organismo (truco: beber dos litros de agua al día ayuda a combatir la celulitis ya que disuelve los bultitos de grasa que la forman).

Yo tengo un secreto mágico que me ha ayudado a llevar una dieta saludable, y es que una vez a la semana o así me permito un capricho de los que se supone que no deben comerse pero... seamos realistas, ¡todas tenemos alguna debilidad! Sinceramente opino que privarnos de esos caprichos no sirve de nada, sólo para aumentar nuestra ansiedad y hacer que nos saltemos más la dieta, así que sí, ¿por qué no vamos a darnos un caprichazo de vez en cuando? Así sobrellevamos más fácilmente y con menos ansiedad la dieta sana.

Y, por supuesto, ser feliz. Ésa es la primera cosa que debemos poner en práctica para que todo este tinglado aguante, estar bien por dentro y por fuera es un trabajo duro, pero cuando se consigue, ¡todo es mucho mejor!

Con esto me despido hermosas, ¡un beso!